Cada persona tiene asignado un ángel para protegerle, y a pesar que son seres sin un cuerpo físico y viven en el plano espiritual, pueden ponerse en contacto con cada uno de nosotros si así lo deseamos y pedimos.
Dichos contactos pueden ser por medio de pensamientos, visiones o sentimientos. Pero cómo puedo motivar a que esto suceda? a continuación unos útiles consejos a tener en cuenta:
- Ubícate en un espacio tranquilo, apaga la luz y enciende una vela.
- Siéntate en una posición relajada para tu cuerpo y mente.
- Respira profundo y lento, hasta despejar tu mente y dejarla en blanco, mirando la vela.
- Saluda en tu mente a tu ángel, y dile todo lo que desees, agradecimientos, palabras de afecto y cuéntale tus necesidades.
- Escucha las respuestas, ellas llegarán muy sutilmente por medio de imágenes en tu mente muy fugaces, una calidez o sensación de compañía a tu habitación.
- Despídete de él y sal de tu estado de meditación lentamente.
Esto es algo que puede hacerse de la anterior manera, pero también con el tiempo se podría practicar de forma cotidiana durante otras actividades, por ejemplo aprovechando tus momentos de meditación en actividades cotidianas (
ver aquí cómo) como ir en el transporte público o estando en el trabajo.