Entre las diferentes prácticas corporales existentes sobresale el Acroyoga, que une las bases de autoconciencia corporal y espiritual del yoga, con las acrobacias.
Esta combinación da como resultado una terapia holística que potencia el desarrollo pleno como humanos, conciencia, creatividad y flexibilidad de músculos.
Normalmente se practica en pareja, por lo que se considera un derivado del Hatha Yoga, que permite experimentar cómo las acciones y movimientos de otros repercuten en cada ser, llegando a un equilibrio sincronizado.
Esta disciplina no necesariamente exige que seas una persona totalmente experta para practicarla, pues algunas posturas son realmente sencillas para aprenderlas y ponerlas en acción.
Si deseas aprender y experimentar por ti mismo los efectos de esta técnica no dudes en
contactarnos para agendar el día en el que empezarás a darte tal gusto en Shivana.